Canciones

Middlebury Campus_College Newspapers & Magazines_20130726-060230La obra está salpimentada de canciones populares con nueva letra que cantan diferentes personajes. No hay que olvidar a este respecto la presencia en Middlebury desde 1920 de María Díez de Oñate (ver recorte de periódico a la izquierda), que en 1924 publicó un par de libros de canciones populares españolas para la clase de español como lengua extranjera 1. Díez de Oñate tocó el piano en la función, y debió jugar un papel fundamental en la selección de las piezas y su puesta en escena 2. .

Las tres primeras son canciones populares que había recogido, armonizado y grabado Federico García Lorca con La Argentinita en discos de 1931, y que luego grabaría, por ejemplo, Marisol en los años 60:

1. La Tarara (Por y Para)

(Cantable y bailable de Por y Para con música de “La Tarara”. “Amores y diferencias de Por y Para”.)

PARA: Por es tan bonito
que me despepito
yo por Por y grito
Por es mi pasión.

(Estribillo.)

Para es para Por,
Para es para Por.
POR: Por es para Para.
LOS DOS: Para es para Por.

POR: Yo la quiero tanto
que hasta vierto llanto;
Para es un encanto
de preposición.

(Estribillo.)

LOS DOS: Pero hay gente rara
que nos equipara
y en lugar de Para
dice siempre Por.

PARA: Para nunca es Por,
Para nunca es Por.
POR: Por no es nunca Para.
LOS DOS: Para nunca es Por.

Tiene, según veo,
cada cual su empleo.
No es posible, creo,
que haya confusión.

POR: Para nunca es Por,
Para nunca es Por.
PARA: Por no es nunca Para.
LOS DOS: Para nunca es Por.

2. Anda, jaleo (Cláusula)

http://youtu.be/TApnDPauxDI

(Cantable de Subjuntivo. Música de “Anda, Jaleo”.)

CLÁUSULA: Subjuntivo, Subjuntivo,
cuando pienso en ti no vivo,
dime si te di motivo
para hacerte el fugitivo.

Anda, jaleo, jaleo.
Dónde está mi Subjuntivo,
dónde está, que no lo veo?

Dices frases muy bonitas,
y que me vuelven mochales,
pero lo malo es que todas
son frases condicionales.

Ay, cuántas ambivalencias!
Tu cuerpo me gusta mucho,
pero no tus desinencias.

Yo a Indicativo no quiero,
porque, en tiempo y en persona,
tiene un modo adusto y fiero
que a mí me descorazona.

Anda, jarana, jarana.
Mi corazón no razona:
soy hispanoamericana (bis).

3. En el café de Chinitas (Indicativo). «En el café de Chinitas» es una antigua petenera malagueña que cuenta una anécdota del famoso torero gaditano Francisco Montes Reina ‘Paquiro» (1805-1851) en pleno siglo XIX en el Café de Chinitas, prestigioso local de cante flamenco. Un «germano» (delincuente de baja estofa) lo desafía a pelear; se citan en la calle; pero el matón no comparece.

http://youtu.be/2y3X22jKtsI

(Canción de Indicativo. Con música de “En el café de Chinitas”.)

INDICATIVO: Yo soy el Indicativo,
soy el amo del cotarro,
soy más valiente que el Cid,
que Cortés y que Pizarro (bis).
Allí donde me presente
me dirán de esta manera:
ya se ve lo que será,
lo que es y lo que era (bis).
Con mi caída de ojos
es el resistirme en vano:
yo soy el modo del verbo
más torero y más gitano (bis).

4. Adiós, catedral de Burgos (Subjuntivo)

SUBJUNTIVO: (Con Estar y Ser desde hace un rato. Canta con música de “Adiós, catedral de Burgos”.)

I: Si Cláusula no me quiere
no sé qué será de mí.
Ocurra lo que ocurriere
yo he de marcharme de aquí (bis)

II: Yo he de marcharme de aquí
y he de mandarme mudar,
pues no es posible que espere
que alguien me haya de emplear (bis)

III: Que alguien me haya de emplear
ni haga buen uso de mí…
Si Cláusula no me quiere
yo he de mudarme de aquí.

5. Tengo un pañuelo bordado (Subjuntivo). Cueca chilena

SUBJUNTIVO: Ay, qué bar…
Ay, qué bárbaro destino!
SER: Ven a ser…
Ven a servirme licor.
ESTAR: Para estar…
Para estar cerca del vino
TODOS: Hay que ser buen bebedor
y verlo todo de buen color.
ESTAR: Qué contento vas a estar
si te puedes embriagar!
TODOS: Ay, la la la la la la!
Ay, la la la la la la!

6. La Morena Trinidad (Colegialas). Lorca recuerda a la Morena Trinidad cuando llega a La Habana, procedente de Nueva York, esa negra que se paseaba en las canciones de su niñez por el muelle de La Habana: «Sale la morena Trinidad de mi niñez, aquella que se paseaba por el muelle de La Habana». Esta canción era conocida también como «la mulata Trinidad», una habanera sacada de la zarzuela El gorro frigio (Tetaro Eslava, 17 octubre 1888), de Félix Limendoux y Celso Lucio, con música de Manuel Nieto. A la «bella Trinidad» la cira también Alberti en su poema «Cuba dentro de un piano».

http://youtu.be/Xxa6Oc_JcyI

COLEGIALAS: Estudiando triste y sola
la gramática española
sin poderlo remediar
es mi sino protervo
que me enredo con el verbo
con el verbo irregular.

Yo no sé si se dice “yo sabo”,
yo no sé si se dice “yo cabo”,
yo no sé si hay personas sinceras
que emprenden carreras y dicen “yo andé”,
yo no sé qué es un tiempo imperfecto
ni si es muy correcto decir “veniré”.

Uno de los motivos por los que llamo «zarzuelilla» a esta obra es porque el argumento me recuerda a la zarzuela La alegría de la huerta. Hay reminiscencias en los tres personajes fundamentales: Carola o Clausulita, Juan Francisco o Indicativo, Alegrías o Subjuntivo.

  1. María Díez de Oñate se fue a los EEUU porque quería aprender bien el inglés. Su familia no estaba de acuerdo, ya que se trataba de una chica de 17 años, pero al final se salió con la suya, diciendo que iba a casa de unos amigos; en realidad, estuvo de «au pair» en casa de unos judíos, que la trataron muy mal.
  2. María Díez de Oñate había vuelto a España en los años 30 y ocupaba una cátedra de francés en Salamanca en 1936. El estallido de la Guerra Civil la pilló de vacaciones en París con su amiga Georgette, de modo que decidieron irse juntas a los EEEUU, ya que María tenía la nacionalidad norteamericana

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *